Febrero es el mes dedicado en todo el mundo a la concienciación sobre el Cáncer, enfermedad que, según la Fundación contra el cáncer de Panamá, es responsable del 17% de las muertes cada año en nuestro país, situándose como el principal problema de salud.
El Cáncer es, además, una enfermedad silenciosa, una enfermedad que golpea en muchas ocasiones sin saber el motivo, que incluso se dan las situaciones en las que la enfermedad se manifiesta sin antecedentes y sin esperarlo.
A pesar de ello, si sabemos que mantener ciertos hábitos que favorezcan nuestro estado de salud, así como evitar sustancias nocivas para nuestro organismo, son herramientas altamente eficientes en la prevención contra el cáncer.
¿Cómo aparece el cáncer?
El Cáncer se produce cuando nuestras células sufren una alteración por la que comienzan a multiplicarse sin ningún tipo de control, llegando a invadir otros tejidos de nuestro cuerpo, así como a nuestros órganos.
Lo habitual es que las células de nuestro cuerpo envejezcan, mueran y sean reemplazadas de forma natural por nuevas células que origina nuestro cuerpo según son necesarias. En los casos de cáncer el proceso muta y pierde el control. En estos casos, las células viejas sobreviven en lugar de morir y las nuevas se siguen produciendo y creciendo de forma desordenada, momento en el que se crean los tumores.
Aunque el riesgo de tener cáncer puede darse a cualquier edad, según avanza la edad este riesgo es mayor, en especial a partir de los 50 años.
¿Cómo puedo prevenir el cáncer?
Mantener un estilo de vida saludable y evitar sustancias nocivas son elementos esenciales para la prevención del cáncer.
A continuación, les detallamos algunos consejos que deben tener muy presentes:
- Tabaquismo:
El tabaquismo es una de las principales causas de cáncer el todo el mundo. Para que se hagan una idea, solo el tabaco mata a 8 millones de personas al año en América.
Los fumadores tienen mucho más riesgo de sufrir algún tipo de cáncer a lo largo de su vida, sobre todo los que se asocian más a los efectos totalmente nocivos que provocan las sustancias del tabaco en nuestro organismo.
Además, en este caso no lo debemos hacer solo por nosotros. Se conoce a ciencia cierta que las personas fumadoras pasivas multiplican exponencialmente el riesgo de sufrir la enfermedad simplemente por las sustancias presentes en el humo de los cigarrillos.
- La alimentación como factor clave:
Una buena alimentación siempre es una de las formas más eficaces de prevenir cualquier problema relacionado con nuestra salud. A pesar de que una correcta dieta no es una garantía de no poder sufrir cáncer, si reduce las posibilidades de padecerla y prepara a nuestro cuerpo para que se encuentre más fuerte en caso de tener que atravesar por un proceso oncológico.
Por tanto, siempre intenten mantener una dieta equilibrada, con abundantes frutas y verduras, y eviten el exceso de alimentos fritos, procesados y altos en azúcar.
- Consumo de alcohol:
Como hemos comentado en diversas ocasiones desde The Fertile Group, por ejemplo, en relación a la fertilidad de los hombres o a la búsqueda y desarrollo del embarazo en las mujeres, el consumo de bebidas alcohólicas siempre debe ser mínimo y esporádico.
Su consumo en cantidades excesivas puede dar lugar al desarrollo de diversos tipos de cáncer, siendo los más comunes los de mama, pulmón, colon y, en especial, riñón o hígado.
Las probabilidades de manifestar cualquiera de ellos está relacionado directamente con un mayor consumo de alcohol, por lo que es necesaria su moderación.
- Práctica de deporte de forma habitual:
Practicar ejercicio de forma habitual, no solo es aconsejable para mantener nuestra salud en buen estado. La práctica de deporte, aunque se limite a dar paseos varias veces por semana, reduce las probabilidades de que nuestro organismo desarrolle cáncer de mama o de colon, por ejemplo.
- Protección solar:
Es cierto que el sol tiene muchos beneficios para nuestra salud, incluso para nuestro estado de ánimo.
No debemos olvidar que una exposición excesiva al sol, y más aún en las horas donde es más intenso sin utilizar ningún tipo de protección es un factor que desencadenar en cáncer de piel, uno de los tipos más comunes.
Recuerden usar siempre protección solar adecuada y, si llega a ser necesario, utilicen algún tipo de ropa que pueda cubrir las partes que se vean de su cuerpo, como cabeza, cara, cuello e incluso los brazos.
Pruebas de detección temprana, clave en el tratamiento contra cáncer
Al hacerse las pruebas de detección con regularidad se puede detectar de manera temprana el cáncer de mama, de cuello uterino y colorrectal (colon), cuando el tratamiento suele ser más eficaz. Se recomienda que algunas personas con un riesgo alto de cáncer de pulmón se hagan pruebas de detección.
Las vacunas también ayudan a reducir el riesgo de cáncer. La vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) ayuda a prevenir la mayoría de los cánceres de cuello uterino y algunos cánceres de vagina y de vulva. La vacuna contra la hepatitis B puede reducir el riesgo de contraer cáncer de hígado.
Para cualquier información pueden contactar con The Fertile Group en:
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