Preservación de la fertilidad, una manera más de concebir nuestra vida y a nuestros futuros bebés, sin que el paso de los años nos afecte.
La sociedad panameña evoluciona y nosotros cambiamos con ella
En las últimas décadas, el mundo entero y la sociedad panameña han visto como la figura de la mujer ha ido evolucionando. Por este mismo motivo, las mujeres, además de tener la opción de preservar la fertilidad por enfermedad, pueden retrasar el momento de ser madres de manera acorde a lo que la sociedad, el trabajo o su situación personal les demande, pero, ¿qué pasa con el cuerpo?
Cada mujer nace con un número determinado de óvulos que disminuye según pasan los años, así que puede ser qué en el momento adecuado a nivel personal o social de una mujer, el número y la calidad de sus óvulos no sean suficientes. La disminución de la fertilidad se acelera, además, drásticamente alrededor de los 35 años.
La preservación ofrece una alternativa a aquellas mujeres que desean demorar el momento de ser madres, ofreciéndoles las mismas posibilidades de embarazo que en el momento en que congelan sus óvulos.
El tiempo pasa, pero puedes pulsar el botón pausa
Como decíamos antes, el tiempo no juega a nuestro favor:
- Hasta los 24 años la mujer está en la mejor edad para quedarse embarazada a nivel físico.
- De 25 a 30 años se siguen teniendo altas posibilidades de embarazo.
- A partir de los 30 años el número de óvulos de buena calidad empieza a bajar.
- De 36 a 40 años el número y la calidad cromosómica de los óvulos se ven afectados de mayor manera. Un embarazo exitoso, tanto natural, como mediante tratamientos de reproducción asistida, empieza a ser menos probable.
- A partir de los 41 años, la fertilidad de la mujer es baja ya que, de manera natural, el cuerpo de la mujer va preparándose a la menopausia.
Si queremos que el factor tiempo no nos afecte, la preservación de la fertilidad es nuestra mayor aliada.
Con la preservación es posible decidir en qué momento emprender el camino hacia la maternidad, según los planes de vida de cada paciente.
Preservación de la fertilidad, ¿en qué consiste?
La preservación de la fertilidad más común es la técnica que permite congelar óvulos cuando la mujer aún es fértil.
Congelando los óvulos cuando aún son jóvenes y saludables, las mujeres tienen una mayor posibilidad de planificar el futuro a su manera.
Pero, ¿cómo se congelan los óvulos?
Las pacientes de The Fertile Group preservan su fertilidad mediante una estimulación ovárica bajo continua supervisión médica. Los óvulos se aspiran de los ovarios mediante una punción a través de la cavidad vaginal. Una vez recuperados los óvulos y, tras comprobar en nuestros laboratorios su calidad, estos se congelan hasta su eventual utilización.
Preservar la fertilidad, no hay una sola manera de hacerlo
Hasta este momento hemos hablado de preservación de fertilidad solo en femenino y por motivos sociales, pero hay diferentes maneras de preservar, como diversas motivaciones para hacerlo.
La congelación de óvulos es una de las soluciones para mujeres con baja respuesta ovárica, es decir, aquellas mujeres que necesitan más de un ciclo de estimulación para obtener un número suficiente de óvulos de calidad antes de realizar un tratamiento de Fertilización in Vitro.
En caso de endometriosis, por otro lado, una mujer puede congelar sus óvulos, para que esta enfermedad no afecte irremediablemente a su reserva ovárica con el pasar del tiempo.
La preservación de la fertilidad, mediante congelación de óvulos o criopreservación de tejido ovárico, es también una solución más para aquellas pacientes que tengan que someterse tanto a algún tipo de cirugía como a ciclos de quimio/radioterapia que pueden afectar a su capacidad fértil.
También los varones pueden preservar su fertilidad mediante congelación seminal. Este procedimiento se va llevando a cabo desde hace décadas en casos similares a los descritos hasta ahora para la mujer, con resultados muy satisfactorios.
Por último, hay que ser conscientes de que la preservación de la fertilidad no es garantía de un posterior embarazo. Con este procedimiento se preserva la capacidad fértil de una mujer o hombre, pero sucesivamente, el óvulo tiene que ser fertilizado por un espermatozoide para convertirse en un embrión que pueda desarrollarse de manera saludable en el vientre materno hasta el momento del parto.
Para que las expectativas hacia cualquier tratamiento de reproducción asistida se adecuen a la realidad, es importante recordar que a lo largo de la fertilización, desarrollo embrionario y parto hay muchos factores variables y que cada paciente y cada caso son únicos.
Para cualquier información pueden contactar con The Fertile Group en:
+507 382 14 00/01